CUMBRE DE LA UA REVELA LOS ENTRESIJOS DE UNAS ELECCIONES POLÉMICAS
La 38ª Cumbre de la Unión Africana estuvo marcada por estrategias argelinas cuestionables, que contrastaron con la credibilidad de Marruecos dentro de la organización.
La última cumbre de la UA puso de relieve los intentos de Argelia de imponer su candidata a la vicepresidencia. Métodos dudosos, incluida la presión a los votantes, empañaron las elecciones y suscitaron dudas sobre su legitimidad.
COMPETENCIA DESEQUILIBRADA:
La candidata argelina, considerada menos competente que su rival marroquí, se benefició de un trato de favor. Esta disparidad de cualificaciones ha sido ampliamente reconocida, poniendo de relieve la debilidad del expediente argelino.
MARRUECOS, UN ACTOR RESPETADO:
A pesar de toda esta turbulencia, Marruecos mantiene una posición sólida dentro de la UA. Su presencia activa, en particular a través del papel de Director General ocupado por el Sr. Fathallah Sijilmassi, demuestra su compromiso con la organización.
UN REVÉS PARA ARGELIA:
La elección de Ali Mahamoud Youssef, de Yibuti, presidente de la Comisión de la UA, apoyado por Marruecos y sus aliados, es percibida como un revés para Argelia. El apoyo de Yibuti a Marruecos, reflejado en la apertura de un consulado en Dakhla, ha fortalecido la posición del reino.
La cumbre de la UA ha puesto de manifiesto las tensiones y estrategias divergentes entre Argelia y Marruecos. Si bien las maniobras argelinas empañaron la imagen del proceso electoral, Marruecos ha sabido preservar su credibilidad e influencia en el seno de la organización.